Gracias por cada momento, porque en un futuro seran esos momentos los que me ayudaran a seguir de pie.

Hoy me acuerdo, de cada beso de cada caricia, de cada abrazo. Y sonrió. De cada momento juntos de cada alegría, de cada pena y hasta de cada pelea. Y sonrió. No importa lo que pase, ni lo que vivamos, todo lo que me recuerde a ti, me hará sonreír. Cuando te miro a los ojos, solo veo recuerdos perfectos y no la realidad dolorosa que estamos viviendo, no me hace bien, entonces lo evito y vivo en un mundo de recuerdos, el cual me hace feliz. Todo aquello que eramos, era perfecto, lo recuerdo. Y sonrió. Te veo, y sonrió. Gracias, por hacerme reír y sonreír, hasta en los peores momentos.